La sostenibilidad es hoy un pilar central en la gestión de muchas bibliotecas universitarias. Entre las acciones más destacadas se encuentran la digitalización de colecciones, la reducción del consumo de papel y la instalación de sistemas de ahorro energético en sus edificios.
Estas prácticas buscan responder a la necesidad de cuidar el medio ambiente sin descuidar el acceso al conocimiento. Al fomentar el uso de formatos digitales, se reduce el impacto ambiental y se facilita el acceso a la información desde cualquier lugar.
Con estas iniciativas, las bibliotecas se proyectan como instituciones responsables que conjugan la preservación cultural con el compromiso ambiental y social.